Los acreedores de la antigua empresa petrolera OGX (hoy OGPar) controlada por el brasileño Eike Batista, aprobaron un plan de recuperación que convertirá los 5.800 millones de dólares de deuda de la compañía en capital, informó la empresa la noche del martes.

A través de una nota al mercado, OGPar precisó que el plan aún necesita ser homologado por la justicia. La reunión de acreedores se realizó en Rio de Janeiro la tarde de este martes.

"Fue una decisión lógica. La quiebra de la empresa no beneficiaría a nadie, ni a los acreedores, que serían los mayores perjudicados", declaró el abogado Sergio Bermudes, que representa a la petrolera en el proceso, citado en el diario especializado Valor.

El hecho de que la deuda se transforme en capital convierte a los acreedores en accionistas en un nuevo esquema de propiedad, pero la empresa no dio detalles sobre eso en su nota.

Entre sus puntos, el acuerdo establece un financiamiento de 215 millones de dólares "que garantiza a la compañía los recursos necesarios para seguir operando", señaló la nota enviada al regulador brasileño.

De ese total, un grupo de acreedores ya aportó 125 millones. El resto de los recursos estará abierto a la participación de todos los acreedores.

La prensa local señala que Batista - que llegó a ser el hombre más rico de Brasil - perdería el control de la petrolera y, por otro lado, que un grupo de accionistas insatisfechos con el acuerdo de este martes podrían impedir que la justicia le dé luz verde al proceso.

Consultada por la AFP, una responsable de prensa de OGPar en Sao Paulo dijo que no se referirían a la nueva estructura de capital por ahora.

Antigua joya del grupo de energía y minería EBX de Batista, OGX recurrió a la protección judicial en octubre de 2013 para evitar una quiebra.

El declive de la compañía había comenzado a mediados de 2012 cuando reconoció que no cumpliría sus metas de producción de petróleo.