NTTradio. Programa el aullido, 07 de diciembre de 2017.

No quiero que amigos y parientes se disgusten conmigo por lo que voy a decir, pues los tengo de lado y lado de los sistemas políticos tradicionales y algunos defienden por oficio o a golpe de talonario que si el del frente roba, que sí robó, pero ninguno dice "vamos a acabar con la corrupción de donde venga". Que los quiero, los respeto y no los juzgo porque para juzgarlos habría que ser imparcial y por el cariño que les tengo debo quedarme fuera ya porque no lo soy, tenerlos a ustedes de amigos o familiares es de lo mejor que me ha pasado.

La corrupción es mala venga de donde provenga y la presente quien la presente. Hay que condenarla sin disfraz y hacer una gran comisión anticorrupción, nombrada y dejada trabajar independiente de que caiga quien caiga, así sea el que la nombró.

El sistema actual de "perseguiré la corrupción en oposición", carnal de "no veré la del gobierno que yo apoyo" funciona como funciona el diablo: el mejor de los disfraces es su impunidad.

Mientras de lado y lado se nieguen a aceptarla puede seguir campeando a sus anchas.

Si cada partido se pusiera serio y persiguiera la corrupción a lo interno, presentando de oficio las denuncias de sus correligionarios y limpiando su casa en poco tiempo habríamos cambiado el chip juega vivo por juega limpio.

Seguimos entregando nuestras cosas valiosas... al que nos muestra un traje de lentejuelas

Cuando ser honesto no se vea como una desventaja electoral que no granjea apoyo ni favores estaremos en camino de lograr la verdadera transparencia. Es un sueño por hora inalcanzable, pero no imposible.

Y nosotros los que no militamos en política activamente ¿Qué?

Nosotros amparamos, apoyamos y sustentamos ese monstruo pluricéfalo cuando miramos a otro lado a la hora de las elecciones. No estudiamos propuestas y capacidades para cumplirlas sino que puesto me van a ofrecer a mí, como le irá a mi amiga, como no pierdo el pan de la boca de mis hijos, quien reparte mejores suéteres o abrebocas.

Y luego, en 2019, cuando se cumplan los 500 años de fundación de la Ciudad de Panamá, entre vítores de unos y lamentos de otros, nos quejaremos  de que los españoles engañaban a los indígenas dándoles un espejito para llevarles su oro, pero en pleno siglo XXI, sin españoles, colombianos ni "gringos" al mando nos comportamos, en tiempos de democracia, libertad y soberanía,   igual o peor de desconcedores que nuestros marginados ancestros: seguimos entregando nuestras cosas valiosas como la programación y cumplimiento de planes de desarrollo en salud, educación, vivienda y equidad, por decir algo, al que nos muestra un traje de lentejuelas.

Basta ya, panameño y panameña, basta ya.

#nttradio #elaullido