A partir de estimular el lenguaje sonoro y priorizar lo visual, esta tarde dio inicio la temporada de la puesta en escena “Un campo”, escrita por la canadiense Louise Bombardier y traducida y dirigida por Boris Schoemann. La pieza, que estará en el Teatro Benito Juárez los sábados y domingos hasta el 25 de septiembre próximo, subraya los valores de la amistad, enfatiza en la búsqueda del hogar anhelado y se centra en el sentimiento de pertenencia a una tierra. Todo acompañado por el magnífico trabajo de Joaquín López “Chas”, encargado del diseño sonoro. Durante la obra, el auditorio recorrerá el campo de cualquier parte del mundo en donde existe el exterminio, la guerra y la imposición por parte del más fuerte; en un trabajo en el cual se le da cabida a la imaginación a partir de sonidos dignos de la naturaleza y recursos teatrales sencillos, pero bien utilizados. Con los constantes pleitos, discusiones y mal entendidos que actualmente se viven alrededor del planeta, “Un campo” toma conciencia acerca de la importancia de la defensa del entorno humano para el bienestar de su población. Así, un niño común y corriente llega a un campo cualquiera, donde la fauna es víctima cotidiana de las balas y el fuego. Al lado de una “bestia” y un hombre que aprende a leer, el menor enfrenta la brutalidad, se da cuenta del valor de la educación y desafía el lado oscuro de los otros para enfrentar los más profundo de su ser. Gracias a una buena caracterización de los personajes, trabajo a cargo de Pilar Boliver, y la construcción del escenario, por Alberto y Jaime Orozco, Luis Otero y Pablo Sánchez, la obra logra el objetivo de transmitir el ambiente de naturaleza, que es interpretado de manera creativa para tomar un lugar importante dentro de la historia. La obra, producida por la compañía Los Endebles A.C., cuenta con la participación de los actores Alejandro Morales, Leonardo Ortizgris, Fernando Bonilla, Victoria Benet y Olivia Lagunas. A partir de este fin de semana, el Teatro Benito Juárez presentará cada sábado y domingo, hasta el 25 de septiembre próximo, la fábula escénica dirigida para niños a partir de ocho años.