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El banco central de México elevó el jueves su tasa de interés referencial ubicándola en su más alto nivel en casi ocho años, presuroso por evitar un contagio inflacionario, tras un fuerte aumento del costo de los combustibles y ante una persistente volatilidad del tipo de cambio.
La decisión del banco ocurre justo tras conocerse que la inflación interanual de México se disparó en enero a 4, 72%, su mayor nivel desde septiembre de 2012, a consecuencia de la liberalización, por primera vez en el país, de los precios de la gasolina, lo que implicó aumentos de hasta más de 20% en dicho combustible y desató una ola de violentas y protestas en el país.
Así, la autoridad monetaria elevó su tasa de referencia en 50 puntos base para ubicarla en 6, 25%, hilando su cuarto incremento consecutivo y dejándola en su nivel más alto desde marzo de 2009, cuando la economía mexicana aún enfrentaba los efectos de la crisis financiera de Estados Unidos.
En su comunicado, Banxico destacó que el movimiento busca "evitar contagios al proceso de formación de precios en la economía, anclar las expectativas de inflación y reforzar la contribución de la política monetaria al proceso de convergencia de la inflación a su meta".
La meta de inflación del Banco de México es de un 3, 0% anual, con un rango de variación hacia arriba o hacia abajo del 1, 0%.
El banco agregó que, hacia adelante, seguirá muy de cerca la evolución de todos los determinantes de la inflación y sus expectativas de mediano y largo plazo.
Precisó además que pondrá especial atención en el "traspaso potencial de las variaciones del tipo de cambio y de las cotizaciones de las gasolinas al resto de los precios, así como la posición monetaria relativa entre México y Estados Unidos y la evolución de la brecha del producto" interno bruto.
El gobierno mexicano, que tenía previstos dos nuevos incrementos del precio de los combustibles en febrero, anunció la semana pasada que mantuvo sin cambios los precios al no registrarse fluctuaciones en los mercados internacionales.
El peso mexicano, que cerró el jueves en 20, 75 unidades por dólar, ha recuperado terreno en las últimas semanas tras caer a mínimos históricos de más de 22 por dólar en enero, cuando el entonces presidente electo estadounidense Donald Trump amenazó con sancionar a compañías que muden inversiones de Estados Unidos a México y reiteró que construiría un muro fronterizo.
La institución prevé que durante 2017 la inflación se ubique por encima de la cota superior de su intervalo de variación, que es el 4, 0%, aunque anticipa que durante los últimos meses del año retome una tendencia convergente hacia la meta y se sitúe cerca de 3, 0% al cierre de 2018.