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El artefacto ha provocado daños y un incendio en un instituto de criminología, sin heridos
Las autoridades han atribuido a un "incendio intencionado" la explosión que se registró en la madrugada del lunes en el Instituto Nacional de Criminología de Bruselas, precisando que ha sido eso lo que ha provocado la deflagración. No ha habido víctimas, el edificio estaba vacío, aunque se han registrado daños materiales de importancia. De momento, se han detenido a cinco personas, que están siendo interrogadas, bajo la sospecha de haber provocado el incendio.
Las primeras investigaciones apuntan a un acto premeditado por el crimen organizado
La fiscal INE Van Wymersch sostuvo que no hay indicios de momento que el incendio en el edificio, que estaba vacío en el momento de los hechos, sea un ataque miliciano, aunque por ahora no se ha descartado ninguna hipótesis. "ha sido un incendio intencionado, un incendio deliberado en el laboratorio de la policía federal", explicó. "Con un incendio se producen explosiones, pero no se lanzaron explosivos dentro o se instalaron", aclaró la fiscal. Según Van Wymersch, aunque una de las hipótesis que se barajan es que haya podido ser un atentado, "ciertamente no es el primero en el que estamos pensado". "Pensamos más en un incendio premeditado por el crimen organizado. No tenemos indicios de que fuera terrorismo", ha insistido. El ataque fue perpetrado por más de una persona, aclaró Van Wymersch. Según la cadena RTL, un coche se saltó las barreras de las instalaciones sobre las 2.00 horas y poco después se escuchó la explosión. El Instituto Nacional de Criminalística y Criminología se encuentra ubicado en el barrio Neder-Over-Heembeek . El centro, que depende del Servicio Público Federal de Justicia, asiste y asesora a las autoridades belgas en sus investigaciones, en concreto, lleva a cabo las investigaciones forenses en los casos criminales, según su web. La alerta terrorista en Bélgica se mantiene en el tercer nivel desde los ataques en el aeropuerto de Bruselas y el metro de la ciudad, que provocaron 32 víctimas mortales y fueron reivindicados por Estado Islámico.