Hoy, día 7 de Junio, se acaba de hacer oficial, a través de comunicado en la web del Real Madrid, el esperado fichaje de Eden Hazard, el mejor jugador de la Premier League, y el jugador de fútbol más relevante del panorama mundial, fueraparte de CR7 y Messi. El belga ha firmado hasta el año 2024, llega con 28 años, en plena madurez, una edad que le va a permitir dar lo mejor de su vida deportiva en el Club blanco, y demostrar que, las ganas que ha mostrado siempre que ha podido, por vestir la elástica merengue, son reales y, los 100 millones, según dicen, que se pagarán por él, como en otros casos, resultarán calderilla, a la postre.

100 millones (más 15 en variables, dicen), sí. Una pasta que, a partir de hoy, darán para construir no sé cuántos hospitales y para dar de comer a la mitad del continente africano, pero nunca se compararán con los 160 de Coutinho, o los 140 de Dembelé, de los que nadie ha dicho nada. Eden finalizaba contrato el año que viene, es decir, que su valor en otras condiciones, seguramente habría superado 200 millones. Una gestión por parte de la Dirección Deportiva madridista (esa que, por lo visto, no existe), muy buena, puesto que lo que se está fichando es la piedra angular del Real Madrid del próximo lustro. El jugador sobre el que habrá que poner a trabajar toda la maquinaria del equipo para diseñar un estilo de fútbol que resulte en la mayor productividad posible de Hazard.

Pero no nos engañemos. Eden Hazard no es un Cristiano Ronaldo, ni siquiera llega, al menos de momento, a ser un Bale en el mejor momento de forma, ese que promediaba una veintena de goles y las mismas asistencias. Por ello le empezarán a caer palos al minuto. Desde todos sitios, incluído el propio. De hecho, serán los palos que le caigan desde su propia afición, abducida por "los de siempre", los más molestos y preocupantes, ya lo sabemos... Que si no marca demasiados goles, que si le quita minutos para su progresión a tal o cual jugador, etc. Necesitará más protección que la que se le ha brindado desde el Club a Gareth o al mismo CR7, en su día.

No obstante, hoy no es día de hablar de lo que pasará. Ni de las bajas que se deben producir, dado el overbooking de la plantilla en estas fechas. Hoy es día para celebrar la incorporación de un futbolista diferente, de los determinantes, de los que hacen que merezca la pena pagar una entrada para ver uno de sus eléctricos desbordes en vivo y en directo, de los que revalorizan una competición tan devaluada últimamente como La Liga, que se suma, en esta semana, al fichaje de delantero más prometedor de Europa, Luka Jovic. Todo, ambos fichajes, quiero decir, por un precio igual al del esquinitero fracaso de Coutinho. A día 7 de Junio, insisto. Es para estar más que satisfechos.

¡HALA MADRID!

* * *

La Libreta de Mou , y también a la cuenta