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Brasil cuestionó ante la Organización Mundial de Comercio (OMC) "los subsidios concedidos por el gobierno canadiense" al fabricante de aviones Bombardier, lo que fue rechazado por Canadá que aseguró que sus medidas de apoyo al sector están en regla con las condiciones del organismo.
"Brasil presentó (...) un pedido de consultas con Canadá, en el ámbito del Sistema de Solución de Diferencias de la OMC, sobre los subsidios concedidos por el gobierno canadiense al sector aeronáutico a nivel federal, provincial y local, en particular en los programas C-Series de la empresa Bombardier", indicó el ministerio de Relaciones Exteriores brasileño en un comunicado.
Asimismo, denuncia que Bombardier -competidora de la brasileña Embraer en el sector de aviones comerciales y corporativos- "tan solo en 2016 recibió por lo menos 2.500 millones de dólares de apoyos gubernamentales".
Esos subsidios "afectan artificialmente la competitividad internacional del sector, de manera incompatible con las obligaciones asumidas por Canadá ante la OMC", prosigue.
En un correo electrónico a la AFP, un vocero del ministerio de Comercio de Canadá aseguró que "las medidas de apoyo a la industria aeroespacial, incluida Bombardier, fueron desarrolladas con pleno conocimiento de las reglas de la OMC y se ajustan a sus condiciones".
"Las asociaciones público-privadas son la norma en ese sector. Somos optimistas sobre el hecho de que nuestro anuncio respeta el derecho internacional", dijo el vocero Joseph Pickerill.
El pedido de consultas de Brasil constituye el primer paso de la apertura de un litigio en el ámbito del Mecanismo de Solución de Diferencias de la OMC, una institución con sede en Ginebra. Los dos países deben fijar ahora fecha y lugar para iniciarlas.
"Creemos que es un caso sólido", declaró en Brasilia el subsecretario general para Asuntos Económicos y Financieros de la Cancillería, Carlos Márcio Cozendey.
El embajador dijo que el gobierno brasileño seguía desde hace tiempo el caso, pero decidió llevar el caso a la OMC después que Embraer perdió ante Bombardier una licitación abierta por la compañía estadounidense Delta Airlines, que adquirió 75 aviones C-Series canadienses por 5.600 millones de dólares.
Según Cozendey, la propia Delta reconoció que los bajos precios pesaron en la elección.
Incluso en el balance de Bombardier "parte de esas ventas se registraron como pérdidas", insistió el embajador.
Embraer emitió igualmente un comunicado en el que exige que "las condiciones ecuánimes de la competencia se respeten".
"La compañía canadiense sigue recibiendo subsidios", que "fueron fundamentales para el desarrollo y la supervivencia del programa C-Series, así como para que Bombardier ofrezca sus aeronaves a precios artificialmente bajos", afirmó el CEO de Embraer, Paulo Cesar Silva, citado en el comunicado.
Los C-Series son aviones de fuselaje estrecho, que compiten en el mercado de aparatos de 100 a 150 asientos.
Embraer es el tercer fabricante mundial de aviones comerciales, detrás del estadounidense Boeing y el europeo Airbus. Produce igualmente aparatos ejecutivos y militares.