Eike Batista, que llegó a ser el hombre más rico de Brasil, fue multado por el ente regulador del mercado a pagar 1, 7 millones de reales (437.500 dólares) por falta de información sobre operaciones de venta de acciones de sus empresas.

La estatal Comisión de Valores Mobiliarios (CVM) juzgó a Batista en cuatro procesos relacionados con las empresas MPX de energía (hoy Eneva), LLX de logística (Pruno), la petrolera OGX (Ogpar) y CCX Carbón Colombia, en las que no informó al mercado oportunamente detalles sobre operaciones de venta de acciones en medio del declive del imperio X de Batista.

Batista, que llegó a amasar una fortuna de 30.000 millones de dólares gracias a sus negocios en minería y petróleo, enfrenta un juicio en la justicia por manipulación del mercado de valores mediante el uso indebido de información privilegiada para vender acciones de su compañía.

El proceso está paralizado a espera de un nuevo juez. El anterior fue apartado del caso al ser sorprendido conduciendo por Rio de Janeiro el Porsche Cayenne de Batista que él mismo había ordenado incautar.

El histriónico empresario supuestamente engañó a inversionistas en un plan para atraer 1.000 millones de dólares a OGX (hoy Ogpar), cuyas metas de producción eran extremadamente optimistas, pese a que muchos de sus pozos finalmente no poseían el potencial de producción proyectado en un principio.