Con una lluvia de dulces para la buena suerte y apadrinado por Mayte e Isabel Lascuráin, Ana Cardozo y Carlos Ortega, Odín Dupeyrón celebró 700 representaciones de su monólogo "A vivir", que desde hace cuatro años presenta en el teatro Ofelia de la Ciudad de México. A lo largo de una hora con 50 minutos el actor se entrega física y mentalmente en el escenario mediante su personaje de "Marciano", con el que hace reír y hasta llorar al público. Se trata de un individuo que da su testimonio, luego de seis meses, respecto al curso de superación personal que ha tomado y de la transformación experimentada gracias a los consejos del doctor "Augusto" (ser imaginario) para hallar la felicidad. "A vivir" es una obra de teatro escrita, dirigida y producida por Dupeyrón, en la que habla que el verdadero problema de la vida no radica en que ésta termina, sino en que el ser humano la empieza a vivir demasiado tarde. Al concluir la función, Odín recibió una prolongada ovación de pie del público que lo premió por su trabajo escénico en el monólogo. "Muchas gracias por venir en esta noche tan especial, a la salida van a encontrar estos formatos para que me den sus opiniones y sugerencias sobre el monólogo en el que me doy la oportunidad de lanzarme como actor, director, escritor y productor", dijo. Asimismo, aprovechó para convocar a los asistentes a adquirir su libro "Colorín, colorado este cuento no se ha acabado", del que dijo se han vendido 225 mil ejemplares desde que salió al mercado, colocándose entre las publicaciones más comercializadas en México. La obra se presenta los miércoles a las 20:45 horas y los domingos a las 18:00 horas, con un debate al final con el público, que le ha brindado su apoyo y lo ha mantenido en cartelera gracias a la publicidad de boca en boca. Dupyerón explicó que a menudo realiza funciones a beneficio de casas de niñas abandonadas, personas de la tercera edad y enfermos terminales con Sida. Señaló que este fin de semana hubo una función dedicada a enfermos de esclerosis quística, y en su opinión, "no saben de lo que se pierden cuando se actúa para tareas de esa naturaleza". "Esta noche es muy especial, pues celebramos varios acontecimientos, develación de placas, son 700 representaciones y cuatro años de estar en escena. La verdad que no acostumbro a hacerlo, y menos con personalidades", añadió. Mencionó que siempre ha invitado a gente muy especial para él, "a gente que amo, la primera placa la develó mi mamá, luego mi maestra de primaria y gente que me ha enseñado a vivir como sus mejores amigas". Para esta ocasión invitó a varias personas que al paso del tiempo se han convertido en grandes amigos como Isabel y Mayte Lascuráin, Ana Cardozo y Carlos Ortega, a quienes les pidió que lo acompañaran en el escenario. Ana develó la placa por las 100 funciones, mientras que Carlos la de las 500, en tanto que Isabel y Mayte la de las 700 representaciones. Las ex Pandora agradecieron que las hayan invitado como madrinas de la ceremonia y señalaron que admiran todas las facetas de Dupeyrón, de quien se sienten orgullosas de contar con su amistad. Más tarde, Odín apareció con un canasto en las manos lleno de dulces y solicitó a sus invitados que los arrojaran al público, pues explicó que es sinónimo de buena suerte.