El objetivo de sanear tus finanzas es cancelar todas tus deudas pendientes y ahorrar una cantidad de dinero suficiente con la que poder hacer frente a imprevistos que puedan surgir en el futuro. De esta manera, si vuelves a verte en una situación similar, podrás esquivarla con mayor facilidad. 

Paga tus deudas

Si has acumulado deudas y estás en una lista de morosidad, tienes que arreglar esto como antes. Encontrarse en una lista de morosidad como ASNEF puede dificultarte gravemente acceder a cualquier producto financiero en el futuro. 

Para salir de una lista de morosos lo primero que tienes que hacer es pagar tus deudas. Para ello, intenta recurrir siempre en primer lugar a tus propios fondos y, solo si es estrictamente necesario porque no tienes otra forma de hacerles frente, pide un préstamo. Al pagar las deudas con tu propio dinero evitarás pagar intereses. 

En el caso de tener deudas con diferentes entidades, es recomendable pedir un préstamo de reunificación de deudas. Este producto permite unificar todas tus deudas en una sola cuota. Aunque a veces suelen pedir una garantía hipotecaria para conceder este préstamo, se puede reunificar deudas sin tener una propiedad. 

Haz un presupuesto

Puede parecer una idea muy tediosa, pero es la mejor forma de tener tus finanzas controladas y saber en todo momento lo que ingresas y lo que gastas. Además, de esta forma podrás detectar fácilmente gastos extra de los que puedes prescindir y ahorrar. 

Lo primero que tienes que hacer para sanear tu economía es saldar todas las deudas

Además, actualmente existen muchas aplicaciones que pueden ayudarte a llevar un control exacto de todo lo que gastas e ingresas. Estás app, se enlazan directamente con tus cuentas y reflejan todos estos movimientos, por lo que no tendrás que hacer nada, tan solo revisarla de vez en cuando para ver si estás cumpliendo con tus objetivos. 

Contrata un producto de ahorro

Una vez detectados los gastos que debes suprimir debes fijarte una meta de ahorro. Para ello, las entidades financieras ponen a tu disposición muchos métodos de ahorro que te permitirán ahorrar para la jubilación o por si te surge algún imprevisto. 

Dependiendo del riesgo y la rentabilidad que quieras darle a tu dinero puedes encontrar desde fondos de inversión, planes de pensiones, depósitos y cuentas de ahorro. Lo más conveniente es que acudas a tu entidad de confianza y te informes sobre tus posibilidades. 

Una vez hayas cumplido con todos estos puntos, no dejes que tus objetivos a corto plazo tapen a tus objetivos a largo plazo. Crea hábito de ahorro y planificación financiera de forma que,   si vuelves a pasar por una mala racha, no te pille desprevenido.