Aunque soy carnívoro, la carne de conejo no es mi carne favorita, pero como se ha de comer de todo y me encontré con un cuarto de conejo en el congelador… pues a cocinar conejo toco.

Aunque casi todos sabemos hacer un conejo al ajillo, viendo como lo hacen los demás, siempre se puede copiar alguna buena idea.

En este caso me base en la receta de la web “Recetas de Rechupete” es su receta “Conejo guisado al ajillo”

Ingredientes (2 personas):

¼ conejo (lo ideal sería ½ pero como me gusta poco mejor rellenar después con otra cosa)

1 cabeza de ajos

250 cl de cava

Aceite de oliva

Sal

Pimienta

Tomillo (fresco sería ideal, pero me conforme con tomillo seco)

Preparación:

En primer lugar trocearemos el conejo, si no lo hemos comprado troceado, lo salpimentamos y le añadimos el tomillo, reservándolo.

Mientras pelamos la cabeza de ajos, aplastamos estos un poco con el cuchillo, para facilitar su pelado y de paso que al freír los ajos facilitar que dejen su gusto en el aceite.

En la cazuela donde haremos el conejo, freímos los ajos con abundante aceite, cuidando que no se nos quemen, conforme vayan tomando color los ajos los vamos retirando.

Una vez sacados del aceite todos los ajos, doramos el conejo.

Cuando el conejo tenga color, volcamos el cava, dejamos que evapore el alcohol, añadimos los ajitos fritos y bajamos el fuego al mínimo.

Dejamos cocinar alrededor de una hora con el fuego casi apagado, vigilándolo para que no se quede seco, si fuera necesario se le puede añadir un poco más de cava, pero como cocinamos con el fuego prácticamente apagado y con la cacerola tapada, poco liquido perderemos.

Servir bien caliente cuando el conejo este bien blandito.