El Indice de Precios al Productor (PPI), uno de los termómetros de la inflación en Estados Unidos, aumentó 0.8 por ciento para los bienes terminados en noviembre, el doble que el mes precedente, reportó hoy el Departamento del Trabajo. El PPI, que mide el valor de las mercancías al mayoreo, había aumentado 0.4 por ciento en octubre pasado y las expectativas de analistas rondaban un aumento de una décima de punto porcentual para noviembre. La llamada inflación central, que excluye los volátiles precios de alimentos y combustibles, aumentó por su parte 0.3 por ciento. El índice de la gasolina subió 4.3 por ciento y de los energéticos terminados 2.1 por ciento, de acuerdo con la dependencia, en lo que fue una desaceleración del ritmo de aumento en relación con octubre. En noviembre pasado se reportó que el Índice de Precios al Consumidor (CPI) creció en los últimos 12 meses a su nivel más bajo desde 1957 si se excluye los precios de alimentos y energéticos. El CPI aumentó 0.6 por ciento, su menor aumento desde que el gobierno federal estadunidense inició el monitoreo inflacionario en el país hace más de cinco décadas. Por su parte la inflación para los consumidores urbanos aumentó apenas 0.2 por ciento en octubre, su tercer mes consecutivo en que se mantiene congelado, con lo cual acumuló un incremento de sólo 1.2 por ciento en los últimos 12 meses, incluidos alimentos y combustibles,