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El déficit comercial de Japón aumentó en septiembre un 1, 6% interanual, para situarse en 958.300 millones de yenes (7.000 millones de euros), un desequilibrio récord en un mes, anunció el miércoles el ministerio de Finanzas.
Es mucho peor de lo que esperaban los analistas que habían anticipado un saldo negativo de 768.200 millones de yenes.
Se trata del 27º mes consecutivo de déficit para la tercera potencia económica mundial, penalizada por la onerosa factura energética desde el accidente nuclear de Fukushima que llevó a parar todos los reactores nucleares.
En este contexto, las importaciones de gas natural licuado (GNL) crecieron el pasado mes un 21%.
Asimismo, otra subida notable la han protagonizado las telecomunicaciones (+11, 6%), debido sobre todo al lanzamiento del iPhone 6, el nuevo modelo del gigante estadounidense Apple, muy apreciado en el archipiélago nipón.
Al final, las importaciones, lastradas por la debilidad del yen ante las principales divisas, aumentaron un 6, 2% en valor.
En cambio, las exportaciones crecieron un 6, 9%, debido en buena parte a las buenas ventas en el extranjero de coches (+6, 8%) y barcos (+39, 5%). Los instrumentos científicos también tuvieron un buen resultado con una subida del 11, 5%.
Por zonas geográficas, las exportaciones destinadas a Asia crecieron 8, 1%, a Estados Unidos un 4, 4% y un 0, 7% a la Unión Europea, un aumento que está relacionado con la debilidad del yen, ya que en valor caen en el caso de las dos últimas regiones.
El anuncio de este déficit comercial récord en un país que otrora registraba importantes excedentes, coincide con una serie de estadísticas preocupantes para Japón.
El país ha registrado una fuerte contracción de la economía en el segundo trimestre (la peor desde la catástrofe de marzo de 2011), tras la entrada en vigor en abril del aumento del IVA del 5% al 8% y lucha por recuperarse desde entonces, suscitando las dudas sobre la política económica de gasto público del primer ministro conservador Shinzo Abe.