¿Quieres recibir una notificación por email cada vez que Redacción Sociedad escriba una noticia?
Miles de policías venidos de distintos lugares de Estados Unidos participaron este sábado del sepelio en Nueva York del agente de origen puertorriqueño Rafael Ramos, asesinado hace una semana.
Ramos fue asesinado el sábado de la semana pasada por la tarde a sangre fría junto a su colega Wenjian Liu, de 32 años, cuando se encontraban en su patrulla estacionada frente a un conjunto de viviendas sociales en Brooklyn, por un hombre negro que se suicidó poco después.
El autor del ataque, Isamaaiyl Brinsley, había justificado el crimen en las redes sociales, señalando que quería vengar las muertes recientes de dos afroamericanos a manos de policías blancos en unos confusos operativos.
Además del vicepresidente Joe Biden, está previsto que participen en la ceremonia el alcalde, Bill de Blasio, y el Bill Bratton, jefe de la policía neoyoquina, conformada por unos 35.000 uniformados.
De 40 años, casado y padre de dos niños, Ramos ingresó en la policía en 2012 y estaba a punto de convertirse en capellán.
Su velatorio el viernes en la iglesia protestante Christ Tabernacle (Tabernáculo Cristiano), fue un acto emotivo, en el que miles de personas esperaron varias horas para pasar frente al féretro, cubierto con la bandera verde, blanca y azul de la policía de Nueva York y custodiado por una guardia de honor.