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Las grandes ciudades del país sólo destinan tres por ciento de sus recursos a la construcción de infraestructura peatonal, y en materia de movilidad ciclista se invierte sólo 0.4 por ciento, reveló un estudio. El Diagnóstico de Fondos Federales para Transporte y Accesibilidad Urbana, el cual subraya que la inversión en la movilidad urbana es inequitativa, establece que las grandes ciudades mexicanas sólo invierten 11 por ciento en transporte público. Incluso advierte que esa cifra podría ser menor, pues el promedio se eleva debido a proyectos como la Línea 12 del Metro, el Metrobús y las calles peatonales en el Distrito Federal. El estudio del Instituto para las Políticas de Transporte y Desarrollo (ITDP por sus siglas en inglés), fue presentado este jueves por su presidente, Xavier Treviño. El análisis señala que a nivel nacional 76 por ciento del gasto público en movilidad se destina a infraestructura para promover el uso del automóvil particular, como la ampliación y mantenimiento de vialidades. El estudio analizó los ingresos federales y el gasto en nueve zonas metropolitanas del país durante 2011, a través de los ramos 23 y 33, y se reveló que en total las urbes destinaron casi 12 mil millones de pesos de fondos federales al tema de movilidad, de los casi 52 mil millones que reciben. Sin embargo, aunque se invirtió en infraestructura vial, espacio público, transporte público e infraestructura ciclista y peatonal, la mayor parte del dinero se destinó a la movilidad que representa sólo 30 por ciento de los viajes, es decir al uso del automóvil particular. En el estudio, en el que participó Javier Garduño, consultor en Finanzas del ITDP, se enfatiza que los accidentes de tránsito provocan 24 mil muertes y 40 mil heridos cada año, mientras que la congestión vial genera pérdidas por 200 mil millones de pesos en el mismo periodo. En este sentido, se subrayó que el problema de la congestión no se soluciona con la construcción de mayor infraestructura vial, sino que hacen más atractivo el uso del automóvil y provocan el fenómeno de tráfico inducido, mientras que por otro lado se descuida la inversión en medios sustentables como el transporte público o la bicicleta. Luego de un recorrido peatonal por calles del Centro Histórico para mostrar las buenas prácticas en materia de movilidad, los especialistas propusieron replantear la distribución del gasto en materia de movilidad para mejorar la calidad de vida en las ciudades mexicanas. Reiteraron la necesidad de dejar de incentivar el uso del automóvil a través del gasto público y destinar esos mismos recursos a proyectos de movilidad sustentable, como el transporte público, la infraestructura ciclista y peatonal y el espacio público. El estudio abarcó las zonas metropolitanas del Distrito Federal, el Estado de México, Nuevo León, Jalisco, Veracruz, Guanajuato, Aguascalientes, Querétaro, Puebla y Colima, que representan 31 por ciento de la población total del país y 40 por ciento de la población urbana.