En Tampa Florida, viernes 8th de noviembre, 2019 después que una niña siguiendo las ordenes de una maestra al escribir un ensayo sobre lo que piensa sobre el suicidio termino en un examen psiquiátrico involuntario, llamado Baker Act (acto Baker) una ley del estado de la Florida, donde niños de 5 años han sido llevados esposados en una patrulla policiaca a una institución psiquiátrica sin el consentimiento de sus padres y sin notificarles siquiera.

Este Acto Baker pueden llevarse a la persona por 72 horas para una evaluación psiquiátrica involuntaria, violando una de sus cláusulas, donde los menores de edad solo tienen 12 hora para hacer la examinación psiquiátrica. Si el padre forma una “Forma de no Consentimiento” y se la entrega al colegio, quiere decir que no se lo pueden llevar al menor de edad sin avisarle a ello primero.

Lo primero que en la recepción de la institución hizo cuando la madre llego es preguntarle si tiene seguro, que debe pagar $600 solo por tener la ahí, sin darle ninguna ni mayor explicación. La madre sabiendo de los abusos psiquiátricos en el estado, llamo a la Comisión Ciudadana por los Derechos Humanos CCHR.org una organización sin fines de lucros guardiana de la salud mental, responsable de ayudar a promulgar leyes que protegen a los individuos de las prácticas abusivas de la psiquiatría.

Los voluntarios de CCHR lograron hacer que le entregaran la niña a su madre y presentaran cargos legales contra la institución por cada una de las violaciones de la ley Baker, quienes no la entregaron a las 12 horas sino a las 72 horas, la niña permaneció en ese lugar por todo el fin de semana.

Públicamente un abogado que ayuda a las víctimas de los abusos psiquiátricos anuncio que las instituciones psiquiátricas ganan cobrándoles a los seguros $ 1.000 diarios por cada paciente internalizado. El margen de ganancia es descomunal y es otra forma de tráfico humano mantener y llevarse a la fuerza personas para internalízalas personas incluyendo niños.

Inspirado por la visión humanitaria de L. Ronald Hubbard, quien identificó el abuso inherente en los actos de la psiquiatría cuando dijo: “No debe haber ningún grupo de influencia dedicado a la degradación del Hombre", hoy en día CCHR es el preeminente vigilante internacional de la psiquiatría.

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