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Más de 100.000 parejas se dan el "no quiero" en España cada año. La custodia de los hijos en caso de separación recae en las madres en un 65%. La custodia compartida se lleva a cabo en el 30% de las separaciones y tan solo en un 4% se asume por el padre
A lo largo del año 2017 más de 102.000 parejas decidieron separarse e interrumpir su convivencia en nuestro país, lo que supone un uno por ciento más de rupturas que las registradas en el año anterior. De estas rupturas, 97.960 fueron divorcios, con un aumento del 1, 2%; 4.280 separaciones, que descendieron un 1, 7%; y 100 nulidades, con una caída del 14, 5%, según la Estadística de Nulidades, Separaciones y Divorcios correspondiente a 2017 y difundida hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Las cifras que maneja el prestigioso Despacho Altozano Pintado, abogados de divorcios en Málaga, reflejan que en España 2 de cada mil habitantes se terminan separando y el tiempo medio que permanecen juntas las parejas es de 16, 6 años, con algunas diferencias importantes, que van desde los 6, 5 años que pasan juntos de media las parejas que se disuelven por nulidad, los 16 de las que se divorcian y los 22 años de las que se terminan separando.
Sin embargo los problemas llegan cuando la pareja tiene hijos en común. Esta es la mayor preocupación en las pareja que se separan:
'Cuando los padres se separan pierden muchas cosas importantes en la vida pero por encima de todo quienes pierden de verdad son los niños. Su estabilidad familiar tal y como la habían conocido hasta ese momento, cambia y esto siempre trae consecuencias. Lo importante es que ambos progenitores tengan una causa común por encima de todas las discusiones: que los niños sigan creciendo felices.' — Aseguran abogados especializados.
Cuando una pareja decide separarse hay que tener en cuenta dos aspectos fundamentales. La parte legal del proceso y la parte psicológica
En toda separación tenemos en cuenta dos aspectos fundamentales. La parte legal del proceso y la parte psicológica.
La parte legal de la separación
Lo más importante es explicar la diferencia entre separación y divorcio, jurídicamente diferentes. Tal y como explican desde este despacho, la diferencia entre ambos se encuentra en los efectos: mientras que la separación no extingue el vínculo matrimonial el divorcio, sí. Una persona separada judicialmente no podrá contraer matrimonio de nuevo, en cambio una persona divorciada sí. Además, si dos personas separadas se reconcilian no precisarán contraer de nuevo matrimonio (ya que el vínculo matrimonial no fue extinguido). Esto es algo a tener en cuenta a la hora de tomar una decisión.
En esta parte legal es fundamental contactar con un buen profesional que asesore a la pareja sobre todos los puntos cruciales, como por ejemplo el asunto de la custodia (donde hay mucha confusión) y el asunto de la pensión (acordada una vez establecida la custodia).
La parte psicológica
Esta es la parte más delicada. En caso de separación siendo los niños menores de seis años, ¿qué explicaciones dar? Psicólogos profesionales explican que 'cuando una pareja se rompe, los cambios para toda la familia son evidentes. En estos casos, es esencial tener presente que la pareja se ha roto, pero que ello no debe implicar que también se rompa la familia. La familia se transforma pero no tiene porqué desestructurarse ni, mucho menos, desaparecer'. Este mensaje es el que habría que transmitir a los niños, es decir 'sus padres ya no son pareja, pero ellos, como hijos, van a conservar su familia y, con ella, la protección, el cuidado y el amor que ella le ofrece'.
El mensaje que habría que transmitir a los niños es 'sus padres ya no son pareja, pero van a conservar su familia y, con ella, la protección, el cuidado y el amor que le ofrece'