El hecho de que los Dodgers puedan firmar a los principales agentes libres, no significa que lo harán.

La disciplina de los Dodgers de Los Ángeles en el mercado de agentes libres ha sido impresionante desde que Andrew Friedman asumió el cargo de presidente de operaciones de béisbol en 2014. No solo porque no saltaron a muchachos como Bryce Harper o Craig Kimbrel, sino también porque no lo hicieron, no es necesario.

Desde el comienzo de esta temporada baja, los Dodgers se han relacionado con todos los principales agentes libres. Gerrit Cole, Anthony Rendon y Stephen Strasburg están en la parte superior de cada lista. El equipo tiene el dinero para pagar algunos de los jugadores antes mencionados, convirtiéndose en el favorito de la Serie Mundial si lo hicieran. Y los Dodgers los perseguirán, pero solo hasta cierto punto.Esto no es sorprendente. Así es como los Dodgers han operado durante el último puñado de temporadas, "derrochando" solo en sus propios agentes libres como Clayton Kershaw (tres años, $ 93 millones), Kenley Jansen (cinco años, $ 80 millones) y Justin Turner (cuatro años, $ 64 millones). Esos son apenas contratos que rompen récords.

"Es difícil verlos cambiar repentinamente su filosofía", me dijo un ejecutivo de operaciones de béisbol de la Liga Nacional.“Podrían hacer fichajes o intercambios menores y seguir siendo el gran favorito en su división, y tal vez en la liga. Están entre los favoritos de la Serie Mundial sin [Cole, Strasburg o Rendon] ".

Esa última parte es la razón por la cual esas "valoraciones establecidas" sobre las que tuiteó Jon Heyman probablemente se mantendrán. 

Cole y el agente Scott Boras probablemente buscarán un contrato de lanzamiento de récord en el rango de $ 250 millones, y Boras y Strasburg probablemente también buscarán algo al norte de $ 200 millones. Mientras tanto, es probable que Boras y el tercera base Rendon busquen un acuerdo que pague un promedio de $ 30 millones al año, como mínimo.

Los Dodgers no son poco realistas. Han establecido sus objetivos en estos vecindarios, pero en el instante en que esas negociaciones superen esos umbrales, es muy probable que los Dodgers estén fuera, especialmente si los años del acuerdo, no necesariamente el dinero, son demasiado largos para su gusto.

“No es un secreto. Prefieren gastar el dinero que comprometerse con los años”, dijo el ejecutivo. 

Boras es conocido por aguantar hasta que los equipos no solo igualen el dinero que está buscando en términos de valor anual, sino que también se esforzará hasta febrero y marzo para obtener los años también. Lo más probable es que Boras use a los Dodgers como palanca con otro equipo, amenazando con que su cliente ya tenga la cantidad anual que está buscando en el sur de California, por lo que será mejor que aprovechen los años.

También trabajando en contra de la idea de que los Dodgers aterricen en Cole, Strasburg o Rendon es que no tengan agujeros reales en esas posiciones. Kershaw, Walker Buehler, Kenta Maeda, Dustin May, Tony Gonsolin, Julio Urias e incluso Ross Stripling, son sus opciones de rotación. Turner ocupa la tercera base, y si los Dodgers logran un intercambio por el campo corto de los Indios de Cleveland Francisco Lindor sin mover al campo corto titular Corey Seager, que se deslizaría a la tercera base.

Los Dodgers están entre los favoritos sin ninguno de esos tres agentes libres de primer nivel. Esa es la influencia del equipo no solo en las negociaciones con Boras, sino también en poder alejarse de la mesa y buscar alternativas, como Josh Donaldson, que les faciliten mantenerse por debajo del impuesto de lujo de $ 208 millones.

Aunque no son buenas noticias para los fanáticos de los grandes Dodgers, pero todos pensamos que va hacer un largo invierno sin una buena firma. Seguiremos observando y informando.