Muchos perros provienen de una mezcla de al menos dos razas, aunque existen otros tantos casos de una combinación de tres o más razas, llegando a ser identificables. Muchas veces ocurre que un perro tiene ciertas características de una raza en particular y esto nos ayuda a determinar al menos una de las ramas de donde proviene.

Algunos perros de raza mixta pueden heredar las peores características de sus progenitores, mientras que otros exhiben las mejores cualidades de cualquier combinación que haya resultado en su gestación. Lo cierto es que cada perro es único e irrepetible, con un carácter y comportamiento definido que se va formando mediante una adecuada socialización desde cachorro.

Una de las formas de encontrar un perro mestizo es acudiendo a un refugio para mascotas. Lo positivo de adoptar un perro en este tipo de lugares es que podemos averiguar acerca de sus características y ciertos detalles de su procedencia. Dependiendo de las situaciones positivas o negativas que haya atravesado la mascota, se tratará de un perro muy amigable o antisocial.

Una forma interesante de planificar la adopción de un perro de raza mixta es pensar qué es lo que estamos buscando de dicha mascota. Cuál es nuestro ritmo de vida y qué cuidados y atenciones estamos dispuestos a ofrecerle para que lleve una vida saludable. Otras cuestiones importantes tienen que ver con el tamaño del perro, el tipo de pelaje que tiene, el nivel de actividad y todo otro dato de interés para encontrar el compañero perfecto.