Liu Xiang, campeón olímpico de 110 metros vallas en 2004 y el atleta chino más grande de todos los tiempos, se despidió del atletismo en una emocionante ceremonia que coincidió con la reunión de la Liga de Diamante celebrada el domingo en Shanghai.

"Me ha conmovido vuestra preocupación por mí, vuestra comprensión y vuestro apoyo", dijo emocionado a su público Liu Xiang, que anunció hace un mes su retirada de la competición. "Me siento agradecido y honrado", añadió el campeón, de 31 años, cuya carrera quedó marcada por las constantes lesiones que sufrió desde que sorprendió al mundo al coronarse campeón olímpico en Atenas.

Muchos de los aficionados que asistieron a la reunión en el Shanghai Stadium no pudieron contener las lágrimas cuando Liu habló desde la pista.

Liu se convirtió en un ídolo para China desde que se proclamó en el primer campeón olímpico de este país en atletismo y emocionó a todo el país cuando cuatro años después, en los Juegos de Pekín, tuvo que retirarse en la primera ronda de los 110 metros vallas, al no haber superado una grave lesión, llenando de consternación el Nido del Pájaro, el estadio que albergó las pruebas atléticas.

En Londres-2012, cuando parecía que había vuelto a su mejor nivel, se tropezó con la primera valla en la primera serie y se cayó, pero se levantó y recorrió la distancia de la prueba, besando el último obstáculo, consciente de que eran seguramente sus últimos juegos. Desde entonces, no ha vuelto a competir.

"Estoy muy feliz de tener hoy la oportunidad de decir adiós", dijo Liu, quien después mostró su apoyo a una nueva generación de atletas chinos que deben tomar su relevo. "Estoy convencido de que a partir de hoy vamos a tener más atletas y con mejores resultados", añadió. Dos de esas nuevas promesas del atletismo chino son Xie Wenjun, especialista de los 110 metros vallas, como Liu, o el saltador de longitud Li Jinzhe. Incluso en la categoría femenina el atletismo chino puede aspirar a medallas en las grandes competiciones, como demostraron el domingo Gong Lijiao y Lu Huihui, que se impusieron en lanzamiento de peso y jabalina en la reunión de Shanghai.