La constante actividad sísmica por la que nos vemos afectados obliga a construir edificios capaces de resistir a los temblores. Las estructuras con acero corrugado hacen a las construcciones ser más elásticas y menos rígidas, permitiendo así que se deformen pero sin llegar a colapsarse.

Para lograr construcciones con fuertes estructuras a la par que flexibles, utilizamos el hormigón armado. Este hormigón tiene un cuerpo de mallas de acero corrugado que presentan una gran ductilidad, nada quebradizas. Proveen a las construcciones de una mayor flexibilidad ante los movimientos de tierra. En este enlace podemos encontrar como conseguirlas.

En España existe una norma que regula las construcciones sismorresistentes, esta normativa se basa en la resistencia y en la estabilidad estructural del edificio, sin llegar a tener en cuenta las demás instalaciones de la construcción, así como los muros no estructurales. Estas regulaciones se aplican en función de la importancia del edificio y de la zona dónde se edifique.

El acero es un material 100% reciclable, ayudando así al medio ambiente

Las edificaciones de obligada implementación son los hospitales, centros comerciales, parques de bomberos, centros de comunicaciones, etc. En lo referente a la zona, se definen como zonas de aplicación imprescindible las ubicadas en la costa mediterránea, desde Málaga hasta el Pirineo Catalán.

A la hora de cómo diseñar esta estructura, la normativa se fija principalmente en las que se realizan con hormigón armado al aportar importantes propiedades dúctiles dependiendo de su diseño y detalles. Las barras de acero corrugado, nada quebradizas, provee al hormigón de mayor flexibilidad en caso de movimientos telúricos. Este material metálico tiene dibujado resaltos o corrugas que hacen mejorar la adherencia entre el acero y el hormigón, y que formando una malla, nos garantía unos beneficios perfectos para la construcción en zonas de terremotos.

Con buenas propiedades mecánicas como resistencia, capacidad de tensión o elongación mínima, las estructuras de acero corrugado son fáciles de instalar, sin necesidad de grandes apoyos y amplios espacios de trabajo, reducen los tiempos de las construcciones. Asimismo, nos permiten edificios respetuosos con el medio ambiente siendo el material 100% reciclable.

Las mallas de acero corrugado poseen gran ductilidad

Gracias a esto, las edificaciones en España son seguras ante movimientos sísmicos siempre que se trabaje acorde a las regulaciones vigentes, y se utilicen los materiales adecuados.