¿Quieres recibir una notificación por email cada vez que Negocios escriba una noticia?
Aunque el inicio de año se presenta mejor a lo planeado para la economía mexicana, hay que tener calma y evitar caer en triunfalismos, señaló la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra). Refiere que las previsiones de las autoridades son objeto de análisis con base en el comportamiento que la economía presentó en los meses finales de 2010, y se considera probable que el crecimiento para 2011 se encuentre cercano al 4.0 por ciento o incluso más. “Si bien existen las condiciones para tener un crecimiento de esa magnitud, también es cierto que aún no estamos haciendo nada para tener bases firmes para contar con crecimiento robusto y de largo plazo”. Ante ello, prosigue, es necesario diseñar estrategias de desarrollo industrial y empresarial que permitan el crecimiento cuantitativo y cualitativo de los negocios, única forma de elevar la oferta de empleos y el nivel de vida de la población. En su publicación “Sinopsis económica”, considera que una estrategia industrial orientada hacia la competitividad contribuirá si duda a crear condiciones para generar más y mejores empleos. En su opinión, se debe mejorar el ambiente en el que se desarrollan las empresas a través de un marco regulatorio pertinente, que provea los incentivos para que las empresas inviertan, innoven y se reestructuren. Todo ello para contar con las condiciones necesarias a fin de resarcir la pérdida de eslabones de las cadenas productivas; la profundización de la brecha tecnológica; y la desvinculación de la industria que produce para el mercado interno y una industria exportadora. Además, para incrementar las tasas de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) manufacturero, e impulsar el crecimiento del empleo y la productividad laboral de las empresas. Para ello, sugiere en el documento elaborado por su Centro de Estudios Económicos que el Estado genere las condiciones económicas e institucionales que hagan factible la competitividad de la industria. Para retomar la senda de crecimiento sostenido, México deberá fortalecer su economía interna, su productividad y acrecentar su capacidad de competir, pues la economía requiere ser cada vez más flexible para adaptarse a las cambiantes condiciones internacionales. Anticipa que el panorama será tan bueno o malo como lo sea el esfuerzo de modernización que emprendan los agentes económicos.