¿Quieres recibir una notificación por email cada vez que Internacionales escriba una noticia?
El juicio contra la opositora birmana Aung San Suu Kyi, encarcelada la semana pasada por incumplir las condiciones de su detención residencial, comenzó hoy en la prisión de Insein, al norte de Rangún, la principal ciudad de Myanmar. Decenas de partidarios de la Premio Nobel de la Paz 1991 se reunieron este lunes a la entrada de la prisión, pese a la presencia de la policía, que detuvo a un hombre. Los embajadores de Francia, Reino Unido, Italia y Alemania se desplazaron hasta el centro penitenciario para asistir al juicio contra la secretaria general de la Liga Nacional para la Democracia (LND), pero las autoridades no les permitieron la entrada. La Unión Europea (UE) especuló este día con la posibilidad de que tome más sanciones contra Myanmar, un país regido por mano de hierro por la Junta Militar desde 1962. Suu Kyi, dirigente de la oposición de Myanmar (antes Birmania), se encontraba bajo arresto domiciliario desde 2003 antes de que fuera encarcelada el jueves por reunirse con el estadunidense John Yettaw recientemente en su casa. Suu, quien ha estado privada de su libertad 13 de los últimos 19 años, es la secretaria general de la LND, un partido que en 1990 ganó las elecciones legislativas en el país pero los militares se negaron a aceptar los resultados. John Yettaw, de 53 años, se encuentra también en la prisión de Insein, luego de ser detenido por haber burlado la seguridad en torno al domicilio de Suu. El estadunidense, que según responsables en Myanmar es un veterano de la guerra de Vietnam y actuó por iniciativa propia, logró llegar a la casa nadando, ya que ésta se encuentro al borde de un lago, y al parecer se escondió en el domicilio de la opositora durante dos días. Su envío a prisión se produjo poco antes de que expire la orden de arresto domiciliario que pesa sobre Suu y mientras el régimen del general Than Shwe prevé celebrar elecciones nacionales en 2010 que los observadores internacionales tildan ya de proceso fraudulento. El Ejército controla desde 1962 Myanmar, un país situado en el sudeste asiático en el que según Naciones Unidas hay más de dos mil 100 prisioneros políticos.