El gabinete de seguridad israelí decidió el jueves ampliar la autorización para las fuerzas del orden de disparar con balas reales contra quienes lancen piedras, según un comunicado de la oficina del primer ministro.

"El gabinete de seguridad decidió autorizar a las fuerzas del orden disparar balas reales contra lanzadores de piedras y botellas incendiarias cuando cualquier persona corra riesgo y no solo cuando sea un policía", afirmó el comunicado.

"Hemos decidido sancionar más severamente a los adultos que lanzan piedras con una pena mínima de cuatro años de prisión y autorizar multas más importantes para los menores y sus padres", agregó la nota.

Precisó el comunicado que "estas sanciones son válidas para todos los ciudadanos israelíes y los habitantes de Israel", en alusión a los palestinos residentes en Jerusalén Este que no tienen ciudadanía israelí.