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Los coches modernos se vuelven cada vez más sofisticados, ya que cada vez están más basados en el software y hardware tecnológico de hoy en día. De hecho, cada vez se hace más común llevar el vehículo al taller para actualizar su software, ya que se pueden solventar problemas no reportados u obtener ganancias de diversos tipos.
Pero el software, como ya deberíamos saber todos, está escrito por seres humanos. Por tanto siempre va a contener errores de diseño.
Hace escasos días, investiadores de seguridad revelaron como era posible desbloquear un caro vehículo Tesla , simplemente llevando consigo un iphone cualquiera y una aplicación propia que permitiera "crackear" una contraseña de 6 caracteres. Además, a comienzos de este 2014 la propia Toyota tuvo que promover una revisión de urgencia en 1, 9 millones de vehículos híbridos Prius, debido a un fallo encontrado en su software .
Veamos ahora algo diferente
Mazda ha mandado llamar a 42000 clientes del modelo Mazda 6 Sedan en los Estados Unidos, debido a un problema diferente y bastante más grave. Un "bug" de la vida real.
Tal como lo describe Mazda en su informe oficial a la National Highway Traffic Safety Administration, una araña de cola amarilla estaría estableciendo su hogar en motores de Mazda 6, y tiene el potencial de causar pérdidas de combustible y un riesgo de fuego incrementado.
"On certain Mazda6 vehicles, a certain type of spider may weave a web in the evaporative canister vent line, potentially causing a restriction in the line. If this occurs, the fuel tank pressure may become excessively negative when the emission control system works to purge the vapors from the canister. As the canister is purged repeatedly during normal operation, the stress on the fuel tank may eventually result in a crack, potentially leading to fuel leakage and an increased risk of fire. Mazda is not aware of any fires related to this condition."
Mazda ha intentado aplicar varias soluciones mediante hardware a este problema, incluyendo la adición de un resorte en el sistema de control de emisiones, pero no ha sido lo suficientemente eficaz para detener la determinación de estas arañas amantes del combustible, que acostumbran a tejer redes en esa zona.
Por eso, las cabezas pensantes de Mazda han decidido cambiar al plan B: una actualización de software .
Mazda continúa aclarando que los dueños del vehículo podrán obtener todas las reparaciones derivadas de forma gratuita en su distribuidor. Se procederá a la inspección y reparación del conducto de gases, que será limpiado de restos de estos seres. También se comprobará el tanque de combustible, que se replazará con uno nuevo de ser necesario.
También se actualizará el Powertrain Control Module, con nuevo software que permita minimizar las presiones negativas en el tanque.
Esperemos no llegar al punto en el que nuestros vehículos requieran actualizaciones tan frecuentes como ocurre en nuestros compatibles, ya sea combatiendo arañas o hackers maliciosos.