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En un domingo en que Estados Unidos casi se paraliza por el Super Bowl de football americano, Miami Heat y New York Knicks quisieron un poco de protagonismo al salir vencedores en los únicos dos partidos de la NBA disputados en la jornada.
Con los aficionados en las dos arenas, y hasta los jugadores, más pendientes de lo que pasaba en el partido de la NFL que jugaban en Phoenix Seattle Seahawks y New England Patriots, la TV estadounidense transmitió sólo el encuentro de Miami contra Boston y sacó del aire el de New York frente a Los Angeles Lakers.
El centro Hassan Whiteside anotó la mitad de sus 20 puntos durante una racha anotadora del Heat entre el tercer y cuarto períodos, y Miami doblegó 83-75 a los Boston Celtics para frenar una cadena de dos derrotas.
Whiteside, un gigante 2, 13 m de estatura y apenas dos años en la liga, fue el primer sorprendido cuando el técnico Erik Spoelstra diseñó una jugada ofensiva para él en este partido, dando pie a la seguidilla anotadora que definió el encuentro.
"Él elaboró una jugada para que yo anotara, yo lo hice y él siguió dibujando jugadas para mi en su pizarrón", dijo Whiteside, quien encestó 10 de sus 17 tiros de campo.
"Realmente creo que él comenzó a creer que puedo hacer jugadas ahí abajo", añadió el joven de 25 años.
Whiteside también coleccionó nueve rebotes y bloqueó tres tiros, mientras que el veterano Chris Bosh añadió 18 puntos y Tyler Johnson 13, lo que ayudó a compensar las ausencias de los titulares Dwyane Wade y Luol Deng.
Wade se perdió su segundo partido consecutivo por un tirón en el muslo derecho, mientras que Deng se perdió su tercer juego al hilo debido a una lesión en la pantorrilla.
El 'Flash' Wade, quien se lesionó en la derrota del martes ante Milwaukee Bucks, es el primer anotador del equipo con 21, 4 puntos y 5, 4 asistencias por partido.
Avery Bradley y Tyler Zeller lideraron la ofensiva de los Celtics con 17 cartones cada uno, pero no pudieron evitar la tercera derrota en línea de Boston y cuarta en sus últimos cinco encuentros.
En Nueva York, Carmelo Anthony anotó 18 de sus 31 puntos en el tercer cuarto y los Knicks se impusieron a los visitantes Los Angeles Lakers por 92-80.
Pese a ser un tope entre escuadras que se encuentran entre las peores del campeonato, y el superastro de los Lakers Kobe Bryant ausente por lesión, los aficionados de los Knicks se mantuvieron fieles a su equipo y el partido congregó a más de 19.000 espectadores del Madison Square Garden neoyorquino.
Los Lakers siguieron cuesta abajo y apenas encestaron 35, 5% de sus tiros de campo y cometieron 15 costosas pérdidas de balón.
Anthony alegró la noche de los Knicks con una buena efectividad en sus tiros (13 de 25), además de aportar ocho rebotes, dos asistencias y un robo.
El español José Calderón siguió con su buen regreso después de una lesión, y cerró con 9 tantos, cuatro asistencias y dos robos. El argentino Pablo Prigioni se quedó en la banca de los neyorquinos todo el partido.
Por los Lakers, Jordan Clarkson y Carlos Boozer anotaron 19 puntos per cápita, y el último aportó además 10 rebotes.