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El número de homicidios en el estado brasileño de Sao Paulo volvió a bajar este año, pero en Rio de Janeiro subió casi un 20% pese a las medidas de seguridad y a los Juegos Olímpicos, indicaron fuentes oficiales.
En Sao Paulo hubo 3.313 homicidios entre enero y fines de noviembre, frente a 3.605 en el mismo período de 2015, lo cual representa una caída de 8, 13% y su cifra es la más baja desde 2001, informó el viernes la secretaría de Seguridad Pública del estado más poblado de Brasil (44, 7 millones de habitantes).
En Rio de Janeiro (16, 6 millones de habitantes), hubo en cambio un aumento del número de homicidios, con 4.572 casos en los primeros once meses del año, frente a 3.818 (+19, 6%) en el mismo período del año pasado, señaló el jueves por la noche el Instituto de Seguridad Pública (IPP) de este estado.
- Sin bandas rivales en Sao Paulo -
El contraste de tendencias entre los dos estados se explica en gran medida por la hegemonía de una banda sobre las actividades del crimen organizado en Sao Paulo, mientras que en Rio hay disputa de territorios, según especialistas.
"En Sao Paulo la violencia viene bajando desde hace varios años, porque el PCC [Primer Comando de la Capital] impuso su dominio sobre el crimen organizado", dijo a la AFP Alba Zaluar, especialista en temas de violencia de la Universidad del Estado de Rio de Janeiro (UERJ).
"En Rio hay tres facciones del crimen organizado y últimamente el PCC rompió el acuerdo con el CV [Comando Vermelho] y se alió con el ADA [Amigos dos Amigos], rival del CV. Además, actúan las milicias y una banda podrida de la policía", agregó la antropóloga.
Las cifras de Rio "son vergonzosas" y demuestran "el fracaso" de la política de seguridad pública basada en la implantación de "Unidades Policiales de Pacificación" (UPP) en las favelas, afirmó Julita Lemgruber, otra especialista en temas de violencia, citada por el diario o Globo.
A partir de 2008, antes del Mundial de fútbol de 2014 y de las Olimpíadas de 2016, unos 10.000 efectivos de las UPP se desplegaron en 264 favelas, en las que viven más de 1, 5 millones de habitantes, para expulsar a los narcotraficantes que las controlaban desde hacía tres décadas.
Pero los programas sociales (guarderías, escuelas, hospitales) que debían complementar las tareas represivas fueron escasamente implementados. "El remedio de las UPP dejó de surtir efecto, porque el tratamiento se limitó a la ocupación policial", dijo a la AFP Paulo Storani, un exmiembro de los cuerpos de élite de la policía reconvertido en especialista en asuntos de seguridad.
La situación, además, tiene pocas posibilidades de mejorar en un estado al borde de la quiebra, que experimenta enormes dificultades para pagar el salario de sus funcionarios, agrega.
- Más muertes violentas que en Siria -
Según el Foro Brasileño de Seguridad Pública, la violencia en Brasil entre 2011 y 2015 ha provocado más muertes que la guerra en Siria.
En esos cuatro años, en el país sudamericano hubo 278.839 asesinatos, en tanto que el conflicto bélico en Siria dejó 256.124 muertos, precisó el Anuario Brasileño de Seguridad Pública publicado en octubre por esa ONG.
En 2015 hubo en Brasil 58.383 muertes violentas e intencionales, un promedio de 160 por día o una muerte cada nueve minutos, de acuerdo con ese informe.
La tasa de homicidios en 2015 fue de 28, 6 por cada 100.000 habitantes, algo menos que los 28, 9 de 2014, pero muchos más que el límite de 10 por cada 100.000 que la ONU considera como violencia endémica.