5 consejos para retratos en estudio: Cómo sacar el máximo partido a una sesión fotográfica en estudio

Hacer un retrato de estudio puede ser un poco desalentador cuando lo intentas por primera vez. Algunas sesiones son más difíciles que otras, por supuesto, pero cuando sólo estás tú y un modelo con un mínimo de atrezzo, tienes que conseguir posar bien.

Cada modelo tendrá su propio estilo de posar y, como fotógrafo, tendrás que ayudarle en todo lo que puedas. Al ver los ángulos a través del visor, estarás en la mejor posición para juzgar: a veces, un ligero giro de la cintura o una flexión del brazo pueden marcar la diferencia entre una toma elegante o una incómoda.

Vamos a ver algunos de los aspectos básicos; las poses extravagantes de Vogue pueden esperar a otro día. Una vez que te sientas seguro trabajando con una modelo, podrás ser un poco más creativo.

Por supuesto, no debes encerrar a tu modelo en un conjunto predefinido de poses; lo mejor es dejar que aporte su propia energía e ideas. Sólo tienes que estar ahí para asegurarte de que todos están representados de la mejor manera posible.

Siempre digo: "Si tú te ves mal, yo me veo mal, y no quiero que eso ocurra". Coloca dos luces sencillas a la izquierda y a la derecha con softboxes, y empezaremos a hacer retratos...

5 consejos para hacer mejores fotos con equipo para estudio fotografico

1) Ajusta el balance de blancos correcto

Utiliza una tarjeta de grises del 18% para ajustar las condiciones de iluminación de tu estudio. Para mi primera toma, Ria sostiene una tarjeta gris para darme el mejor punto de referencia para el color. (Al promediar la luz en una escena media se obtiene un tono gris del 18%, un valor que los medidores de las cámaras utilizan para obtener una exposición "adecuada").

2) Desplazar el peso

Al principio de la sesión, el o la modelo está de pie frente a mí, con los pies uno al lado del otro y su peso distribuido de forma equitativa. Luego le pido que se pare con los pies ligeramente separados y que cambiara su peso a la pierna izquierda. Aunque sigue estando de frente, esto ya ha crea una sutil curva en S en su cuerpo. A continuación, simplemente le pido que levante un poco la cabeza y ponga las manos en las caderas: estos tres sutiles cambios marcan una gran diferencia en su postura.

3) No te pongas demasiado cómodo

Para una toma ligeramente diferente, prueba a traer un taburete. Si le pides a tu modelo que se siente como para estar cómodo, verás que tenderá a inclinarse hacia atrás y no tendrá dónde colocar las manos de forma natural. Así que le pido a mis modelos que se adelanten y se posen en el borde del taburete. Esto hace que todo vaya hacia delante y crea instantáneamente una toma mucho mejor: un ligero giro de la cintura hará que la modelo esté menos plana.

4) Brazos cruzados

Aunque no es demasiado elegante, esta es una pose sencilla. Sin embargo, como se ve arriba (izquierda), es fácil equivocarse con las poses de brazos cruzados: los brazos de mi modelo se han convertido en el punto más cercano a la cámara y, en definitiva, en el más grande. Así que le pido que meta los brazos con fuerza, lo que automáticamente hizo que también metiera la barbilla. Es una pose mucho mejor en general.

5) Ver los dos lados de la historia

Todo el mundo tiene un "lado bueno" y, aunque algunos de nosotros tenemos dos lados buenos, uno puede ser más fotogénico que el otro. Esto no siempre es obvio a simple vista, por lo que es una buena idea fotografiar ambos lados de tu modelo. A menudo, el pelo cae mejor hacia un lado que hacia el otro, lo que permite ver más la cara del modelo o producir un ángulo más favorecedor.