Qué hacer en Cusco

1. Santuario Histórico de Machu Picchu: Maravilla del Nuevo Mundo

Machu Picchu seguirá siendo para siempre la mayor joya de Perú. Cada día, los humildes visitantes dejan volar su imaginación al explorar estas misteriosas ruinas. Los arqueólogos siguen restaurando el complejo inca, redescubriendo la organización de la ciudad en templos, centros urbanos, piedras sagradas y mucho más. Una visita nos devuelve un mundo inmersivo y alucinante del pasado.

2. Plaza de Armas: Arquitectura colonial

Aunque la ciudad de Cusco fue en su día la capital del Imperio Inca, esta plaza es producto de la invasión española. Los visitantes encontrarán pinturas coloniales colgadas en la inmensa Catedral de Cusco, muchas de ellas pintadas por estudiantes incas en un esfuerzo por imponer los ideales cristianos a los indígenas. La iglesia de la Compañía de Jesús también se encuentra en la plaza, lo que subraya la importancia histórica de la religión. Mientras tanto, el Museo de Arte Popular invita a los visitantes a volver al presente con un toque más ligero.

3. Saksaywaman: Antiguo Lego

Antes de que los incas conquistaran esta región de Perú, el pueblo Killke ocupaba el territorio. Su mayor legado es la ciudadela de Saqsaywaman, del siglo XII, una increíble hazaña de construcción realizada con enormes rocas y sin ningún tipo de mortero. Estas grandes losas de piedra tallada encajan perfectamente y se alzan sobre el árido paisaje en un despliegue espectacular. Sigue siendo un misterio cómo los Killke maniobraron para colocar estas piedras de 200 toneladas en su sitio; un milagro que hay que ver por sí mismo.

Machu picchu, cusco

4. Coricancha: Templo Perdido

Dedicado al dios del sol Inti, este templo inca fue muy querido en todo el Imperio. Era tan importante, de hecho, que los suelos y las paredes estaban chapados en oro puro. Los restos de esta opulenta historia fueron tristemente saqueados por los españoles y sustituidos por una iglesia. Todavía se puede apreciar el increíble trabajo en piedra de los incas en los cimientos. Un museo arqueológico situado bajo el yacimiento reconoce la historia del templo y alberga reliquias de su interior, desde momias hasta ídolos sagrados.

5. Museo Inka: La preservación de un imperio

Construido sobre terrenos incaicos, el museo celebra la cultura y la historia del Imperio Inca. Este pueblo era un increíble artesano, y sus creaciones se han conservado entre estos muros. Los visitantes quedarán asombrados por la opulencia de la orfebrería, los tejidos y las joyas, e intrigados por la tradición de la momificación y la idolatría. En el exterior, en el patio del museo, las tejedoras andinas muestran su destreza y ponen a la venta su artesanía.

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