La planta de jade es un arbusto ramificado y suculento que se cultiva comúnmente en interiores, la planta de jade presenta tallos gruesos y leñosos y hojas verdes brillantes, carnosas y oblongas de hasta dos pulgadas de largo. Afortunadamente, esta planta de bajo mantenimiento vive mucho tiempo y adquiere la apariencia de un árbol en miniatura a medida que envejece. Y es muy fácil de propagar. Simplemente pegue sus hojas en el suelo, y crecerán nuevas plantas.

Son plantas de interior suculentas, bastante resistentes y fáciles de cultivar en interiores, capaces de vivir por mucho tiempo con el cuidado adecuado. Estas tienen una apariencia de árbol en miniatura, atractivas para su uso como planta de interiores decorativas. Viven durante mucho tiempo, se transmiten de generación en generación alcanzando alturas de tres pies o más cuando se cultivan en interiores.

Originaria de Sudáfrica, es considerada como una planta de la buena suerte a sus dueños, por lo que a menudo se dan como obsequios de inauguración de la casas. Debido a que generalmente solo se cultivan en interiores, pueden llevarse a casa o iniciarse en cualquier momento, ya sea desde un vivero profesional o mediante propagación.

Cuidados de la planta

Generalmente las plantas de jade son poco exigentes y muy fáciles de cultivar, susceptibles a demasiada humedad y a una serie de enfermedades, al igual que con todas las suculentas, el riego excesivo es perjudicial para la planta, así que opte por mantener el suelo demasiado seco en lugar de demasiado húmedo. Las plantas de jade también necesitan mucha luz para desarrollarse a su máximo potencial. Sin embargo, si se cumplen las condiciones adecuadas, se desarrollaran impresionante que se puede propagar fácilmente, lo que le brinda muchas plantas adicionales para esparcir por su hogar.

Luz

Las plantas de jade jóvenes y viejas, deben recibir al menos cuatro a seis horas de luz solar al día, siempre manteniendo la planta a salvo de los rayos directos, ya que la luz intensa puede quemar las plantas jóvenes e inmaduras, provocando que las hojas de las más viejas se pongan rojas.

Tierra

La mezcla específica para suculentas es su mejor opción a la hora de cultivar jades, el suelo debe tener un nivel de pH de neutro a ligeramente ácido y un buen drenaje para evitar que se acumule una humedad excesiva, provocando el crecimiento de hongos, hasta pudrir la planta. Si utilizas una mezcla todo uso para macetas, agrega un poco de perlita, de esa forma ayudar as con el drenaje. Además, puede albergar su planta de jade en un recipiente de barro o terracota para ayudar a absorber la humedad adicional del suelo.

Agua

Las plantas de jade deben regarse con frecuencia, durante la primavera y el verano, con la finalidad de que su suelo esté húmedo pero no mojado, asegúrese de que su drenaje sea muy bueno, reduzca su riego haciéndolo desde abajo dejando que la planta se asiente en un platillo de agua, elimine el exceso de agua después de unos minutos y nunca deje que la planta de jade se asiente en el agua.

Temperatura y humedad

Las temperaturas domésticas promedio que oscilan entre 65 y 70 grados fahrenheit, son las preferidas de las plantas de jade, por la noche y en el invierno, estas plantas pueden soportar un ambiente más fresco, de hasta 55 grados fahrenheit, aunque nunca deben mantenerse a temperaturas inferiores a 50 grados fahrenheit durante un período prolongado de tiempo.

Fertilizante

Para obtener una planta de jade hermosa y saludable, aliméntela con un fertilizante de liberación controlada al inicio de la temporada o semanalmente con una solución líquida suave, usando un fertilizante balanceado 20-20-20 a un cuarto de fuerza en plantas maduras y un fertilizante con menos nitrógeno en plantas jóvenes.

Reproducción de la planta

Conocida por su facilidad de propagación las nuevas plantas se pueden propagar a partir de una sola hoja o esqueje tomado de una planta madre, lo que le brinda la oportunidad de aumentar drásticamente su colección con facilidad. El mejor momento para la reproducción de las plantas de jade es durante el verano, ya que reciben mucha luz solar y humedad.

Reproducción por esquejes

- Tome un corte que tenga al menos dos o tres pulgadas de largo, de una planta madura, sana y libre de enfermedades.

- Deje reposar el esqueje durante varios días en un lugar cálido y seco, estará listo para continuar una vez que el extremo del corte se haya secado y cubierto de costras.

- La herida del corte debe ser sumergida en un polvo de hormona de enraizamiento.

- El extremo cortado del tallo debe ser plantado en una maceta que contenga una mezcla de mitad tierra, mitad vermiculita o perlita.

- La planta de jade debe ser regada con moderación, solo hasta que la mezcla para macetas esté húmeda. Su esqueje debería echar raíces en unas pocas semanas, momento en el que puede comenzar a cuidar el esqueje como lo haría con una planta de jade normal.

Trasplante de jade

No es necesario trasplantarla con frecuencia, por lo general se puede hacerlo cada dos o tres años, esto en relación a las plantas más pequeñas y cada cuatro o cinco años para las más grandes. Para plantas de jade de tamaño moderado, una maceta de 4 o 6 pulgadas funciona bien, opte por un recipiente hecho de arcilla o terracota, ya que este eliminará el exceso de humedad del suelo garantizando que su planta no se encharque. Si observa que su planta de jade ya esta superando su contenedor, siga los pasos a continuación para trasplantarla correctamente:

El jade también conocida como la planta del dinero, es utilizada en Feng Shui para promover la riqueza y la prosperidad

- Antes de trasplantar, debe asegurarse de que el suelo esté seco.

- Para aflojar la tierra y eliminar las raíces que puedan estar adheridas a las paredes de la maceta, pase suavemente un cuchillo de mantequilla u otra herramienta plana alrededor del borde interior de la maceta.

- Retire con suavidad la planta de jade de la maceta.

- Se debe eliminar la tierra vieja de las raíces, asegurándose de quitar cualquier raíz podrida o muerta en el proceso. Trate los cortes visibles con un fungicida.

- Ubique la planta en su nueva maceta y rellénela con tierra para macetas, extendiendo las raíces a medida que trasplanta.

- Durante aproximadamente una semana, no coloque agua a la planta y luego comience a regar ligeramente para reducir el riesgo de pudrición de la raíz.

Problemas más comunes del jade

Es posible que se encuentre con algunos problemas que lo lleven a preguntarse por qué su planta no está prosperando como debería, si bien las plantas de jade son bastante fáciles de cuidar y no terriblemente temperamentales, existen algunos problemas tales como:

Hojas arrugadas

Aunque las plantas de jade almacenan agua en sus hojas, las hojas arrugadas son una buena indicación de que su planta no está recibiendo suficiente agua. Pueden ir acompañadas de una caída o un marchitamiento general de toda la planta, la cual deben recuperarse rápidamente una vez regadas.

Pérdida de sus hojas

Si la planta de jade pierde hojas frecuentemente, esta puede ser una señal de que no esta recibiendo suficiente luz. Por lo tanto debe mover la planta a un lugar donde reciba luz brillante de manera indirecta durante al menos seis horas al día y observe si el problema mejora. Si la mayoría de las hojas que caen son hojas viejas, o si la caída va acompañada de un crecimiento de piernas largas, es posible que su planta esté demasiado caliente y deba ubicarse en algún lugar con una temperatura ligeramente más fresca.

Amarilla total

No es tan grave una o dos hojas amarillas en su planta de jade, pero si nota que su planta se está poniendo amarilla por todas partes, el problema es más serio. Generalmente, un color amarillento total de una planta de jade es indicativo de exceso de agua. Aunque aveces se presentan otros signos reveladores (como raíces podridas) y reduzca la frecuencia con la que riega.

Plagas

Los ácaros, las escamas y las cochinillas se presentan con frecuencia en condiciones de interior. Las manchas blancas en tu jade podrían ser plagas. Sugerimos mirar de cerca con una lupa o intentar raspar la mancha para ver si podría ser una plaga. Si no se matan temprano, estas pequeñas plagas proliferan y se esparcen por rincones y recovecos, haciéndolas más difíciles de alcanzar. Las bocas penetrantes de los insectos absorben la energía de su planta, especialmente si su jade ya no es saludable debido a la poca iluminación, una deficiencia de nutrientes o una humedad inadecuada del suelo.

Moho

Si se encuentra en un área de baja circulación de aire con temperaturas frescas pero alta humedad, puede aparecer el mildiú polvoroso. Puede identificar el moho por las pequeñas manchas circulares blancas que se producen en las partes más anchas de la planta. Comenzará en las hojas y, en etapas más avanzadas, se convertirá en hilos esponjosos que se extenderán por toda la planta. Para tratarla, puede rociar la planta con una mezcla de 1 cucharada de bicarbonato de sodio, ½ cucharadita de jabón líquido y 1 galón de agua.

Variedades de jade

La versión familiar de lo que comúnmente llamamos una planta de jade es la Crassula ovata, con sus hojas ovaladas gruesas y carnosas. Pero hay otras como: una variedad enana con hojas más pequeñas y algunas que crecen más, o más estrechas, abigarradas u onduladas, y con diferentes variaciones de color. C. ovata, la típica planta de jade, también se conoce con otros nombres comunes, como planta dólar, árbol de la amistad y árbol del dinero.

En un jardín de macetas, una Crassula puede servir como planta de acento entre una variedad de suculentas más pequeñas. Y debido a su forma de árbol, la planta de jade, particularmente una variedad enana, es una buena (y fácil) candidata para entrenar como un espécimen de bonsai.

¿Cuánto tiempo viven las plantas de jade?

Con el cuidado adecuado, las plantas de jade pueden vivir entre 50 y 70 años, a veces incluso más, se transmiten de generación en generación. Generalmente, las plantas de jade son fáciles de cuidar, sin embargo algunos propietarios de plantas tienen dificultades para determinar el programa de riego correcto al principio.

El jade también conocida como la planta del dinero, es utilizada en Feng Shui para promover la riqueza y la prosperidad. A menudo se dan como obsequios de inauguración de las casas y se pueden encontrar con mucha frecuencia en oficinas, tiendas y restaurantes.

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