En fechas recientes la realeza española realiza una calurosa visita a lo que en su momento fue la mayor de las provincias de Ultramar de la colonia española. Con divina añoranza Don Felipe y su esposa Letizia caminan de manos por las agrietadas calles de la Habana vieja; quizas nostalgicos por los recuerdos que sin duda alguna nos brindan sus empedradas calles, a pocos dias de celebrarse los 500 años de fundada. 

Las calles ruidosas acompañan a la realeza al compás de una conga, los coloridos trajes de las figuras costumbristas, el olor intenso a ron y tabaco de pura calidad. Los soberános llevan a su vez un preciado regalo a la Isla; condecoran con la Gran Cruz de la Real y Distinguida Orden Española Carlos III al honorífico Dr Eusebio Leal, cubano ilustre merecedor de semejante distinción usualmente entregada a aquellos que hayan realizado una magnífica labor en el afan de enriquecer y mantener la cultura y patrimonios hispánicos.

Los reyes rindieron homenaje a los héroes caídos en 1898

Por su parte nuestra afamada reina una vez más hizo realzar sus dotes del buen gusto, luciendo nuevamente su vestido Midi de Massimo Dutti. Mas adelante en la cena que ofrecerian los reyes en el Palacio de los Capitanes Generales de la Habana estrenaría de Roane de Maje un vestido camisero transparente, así como algunos atuendos preferidos de la Colección de Carolina Herrera que en más de una ocación ha utilizado, resaltando por completo el color blanco en su maleta.

La Real visita, luego de cuatro intensos días en la última de las Colonias españolas, se despidieron no sin antes rendir merecido homenaje a los héroes caidos en 1898 cuando los Estados Unidos combró las vidas de mas de 600 oficiales españoles.

En esta ocación la reina estrenó un vestido camisero transparente de Roane de Maje, siendo totalmente certera su elección