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Corrupción, desvíos de recursos y venta de medicamentos
Acapulco, Gro. 20 de Octubre del 2009.- Más allá del escándalo sexual que involucra al subsecretario y encargado de despacho de la Secretaria de Salud del Estado de Guerrero, Rubén Padilla Fierro, y quien por cierto por lealtad a su amigo, el gobernador del estado, Zeferino Torreblanca Galindo, debió de haber su renuncia al cargo que viene ocupando en dicha dependencia, antes de que le salpique el caso de corrupción que por la venta de medicamentos y el desvío de recursos económicos se cometieron en la construcción de los hospitales de Coyuca de Benítez, Chilpancingo y Centro de Salud comunitaria en el municipio de Ometepec.
En todos los casos que revelaremos están involucrados no solamente Padilla Fierro sino que la acusación y el señalamiento involucra a Angélica María Ramos, subsecretaria de Administración y Finanzas, al ex titular de Comunicación Gonzalo Castañón, el hermano del Secretario Particular del jefe del ejecutivo Cesar Bajos Valverde, José Antonio de los mismos apellidos así como al administrativo de la Secretaria de Salud, Mariano Ochoa.
Todos ellos fueron acusados de haber engañado al gobernador del estado en la construcción de los mencionados hospitales, y cuyo recursos económicos andan bailando por ahí, ellos aseguraron al jefe del ejecutivo que los hospitales estaban construyéndose y al poco tiempo le dijeron que ya estaban concluidos, sin embargo, los nosocomios no estaban terminado en los hechos sino solamente en la bonita maqueta que le presentaron.
Cuando descubrieron el engaño, el primero de Coyuca de Benítez fue en el 2007, y en lo que respecta al hospital de Chilpancingo y el Centro de Salud Comunitaria de Ometepec se registró el año 2008, cuando un equipo de producción se trasladó al lugar para grabar los nosocomios y publicitarlas como unas obras de éste gobierno.
Pero eso no es todo a este grupo de funcionarios de la Secretaria de Salud, José Antonio Bajos, Gonzalo Castañón y Angélica María Ramos fueron acusados ante el gobernador del estado de no haber elaborado ni integrado los expedientes técnicos para que el gobierno federal otorgará a la Secretaria de Salud de Guerrero un presupuesto económico de mil 500 millones de pesos que serían aplicados a la rehabilitación de la infraestructura de salud, la renovación de equipo y la adquisición de instrumental de trabajo que tanto se requiere en los hospitales y centros de salud de Guerrero.
El no entregar los expediente le valió al estado que la federación no le vaya a entregar cerca de dos mil 500 millones de pesos, de los cuales, los mil 500 millones representan el 50 por cierto de ese hueco económico que tendrá la entidad y en la que mucho tienen que ver los funcionarios de salud, incluido el protagonista del escándalo sexual y responsable de velar por la salud de los guerrerense.
Sale a la luz la no conclución de la contrucción de hospitales en Guerrero
Pero eso no es todo, luego haber distribuido el archivo fotográfico desde la propia computadora del subsecretario de Salud, y en cual ante la magnitud del escándalo sexual, se conoció lo que era un secreto a voces pero que esta vez fueron ellos mismos lo que se lanzaron acusaciones mutuas y buscaban el deslinde de la venta y compra de medicamentos, y para lo cual las ganancias se repartían en forma tripartita, es decir Angy, Pepe Toño y Chalo, lo que ha representado para ellos un lucrativo negocio personal con el erario del pueblo de Guerrero.
Y es que los medicamentos que se adquirían en lugar de ir a parar a los dispensarios médicos de los hospitales y centros de salud de Guerrero, eran entregados por este grupo de funcionarios estatales de la Secretaria de Salud a varias farmacias privadas del estado y que le reportaban ganancias importantes para repartir, en cantidades de mayor a menor.
Quizás por eso, la pugna por el poder, y por ver quién alcanza, la titularidad de la Secretaria de Salud se ha agudizado al interior de la dependencia, en donde el primero en sufrir el golpe severo fue el mismo subsecretario y encargado de despacho, quien nos solamente ha quedado fuera por la titularidad de la dependencia sino que su principal carta Angélica María Ramos aspira a convertirse en titular de la dependencia de Salud en donde se desempeña como responsable de las finanzas
Hay temor en este grupo de funcionarios, no por lo que les pueda decir su jefe político pues tienen la plena confianza en que el mandatario estatal lo seguirá manteniendo en el cargo, sino por lo que pueda provocar la llegada de Gloria Sierra López, ex candidata a la alcaldía de Acapulco y ex candidata a la diputación federal por el distrito 09, una vez que esta mujer asuma la dirección del Seguro Popular, y es que perciben que Sierra López llegará solamente a cobrar venganza a quienes no supieron coordinar sus dos campañas electorales y que representaron dos derrotas consecutivas.
Dicen que en primera línea está el ecuatoriano y ex diputado local Fernando Donoso Pérez, sin embargo este grupo de funcionarios ya tomó sus precauciones ya respecto y es que ya tiene listo un paquete fotográfico similar al que hicieron circular en la red de redes.
La pregunta es ¿hasta cuando se les permitirá a este grupo de funcionarios seguir cometiendo actos de corrupción en contra del pueblo de Guerrero?