La mayor parte de las nuevas familias y jóvenes que se proponen formar su propio hogar, mirar en un primer lugar a viviendas de nueva construcción. Se trata de un comportamiento casi instintivo, ya que este tipo de inmuebles presentan una serie de ventajas. Una de ellas, como es lógico, es la ventaja de estrenar una nueva, en la que se benefician de legislaciones como la Directiva europea de Eficiencia Energética de Edificios, mejorando el consumo de los hogares. Además, se tratan de viviendas con una tipología y servicios comunitarios, más al gusto y necesidades de los clientes actuales con mayor número de zonas comunes, garaje, trastero, etc.

Por contra no es fácil encontrar este tipo de inmuebles, ya que no existe una oferta que cubra la demanda existente, lo que hace que el precio de los mismo sea mucho más caro que otras viviendas de segunda mano, con unos metros cuadrados parecidos.

Para solucionar este problema, cada vez un mayor número de personas acude a la vivienda de segunda mano, con la intención de realizar una reforma integral en la misma que le permita disfrutar de unas instalaciones actualizadas a la vez que la transforman para acercarla lo más posible a sus gusto y necesidades. Con una reforma se puede realizar un gran cambio en la vivienda, desde los puntos más básicos como la mejora de las instalaciones eléctricas y de fontanería, pasando por la mejora de su aislamiento hasta incluso cambiar la distribución de los espacios, contando con un arquitecto o aparejador que informen y certifique el trabajo a realizar.

Empresas como reformas Majadahonda, son especialistas en este tipo de intervenciones integrales. Gracias a su amplio equipo de profesionales, especialistas en ramas como la fontanería, electricidad, carpintería o pintura. Desde esta empresa de reformas nos indican que el número de trabajos de reformas en Majadahonda de esta tipología ha crecido cerca de un 50% en los últimos 5 años, debido en gran medida por el incremento de la vivienda de primera mano. Gran parte de los trabajos realizados son reformas de viviendas con una antigüedad media de 50 años que requieren de una gran transformación para dejarla a la altura de los estándares actuales de confort incidiendo especialmente en puntos como es aislamiento, actualización de espacios o actualización de las instalaciones.

Aún con el coste de la reforma, las viviendas de segunda mano suponen un ahorro cercano al 30% en comparación con la vivienda de nueva construcción con unos metros cuadrados similares. Esta es una de las razones de mayor peso que ha provocado que cada año más personas se fijen en este tipo de inmuebles para formar un nuevo hogar.