De nueva cuenta, como año tras año, llega la temporada de lluvias y con ellas, la pena de ver a miles de familias de todo el mundo, afectadas por las grandes inundaciones causadas por el taponamiento de drenajes, coladeras y conductos de desagüe, por toneladas de basura que nosotros desechamos como hábito en la vía publica sin crear conciencia del daño que ocasionamos a terceros y sobre todo a nosotros mismos. Es normal culpar a los gobiernos de no proporcionar mantenimiento adecuado y constante a dichos accesos de desagüe, pero también lo es el que la población no logre hacer conciencia y siga tirando y arrojando desperdicios de todo tipo en las grandes y pequeñas poblaciones, lo que conlleva a un circulo vicioso, donde cada temporada de lluvias tenemos que mirar con tristeza como miles de familias pierden parte o la totalidad de sus patrimonios por culpa de estas inundaciones. Pasan los años, y el comportamiento de la población definitivamente no cambia, mostrando a las nuevas generaciones un modelo de conducta equivocado, e irresponsable que con el tiempo solo agrava de manera sustancial el problema. Pensar que una colilla de cigarro no afectara en nada, ni tirar un pañal desechable, una bolsa de frituras o de plástico, una servilleta o un pañuelo de papel, es típica esa manera de argumento. Solo Que la realidad es totalmente diferente pues no es una colilla sino millones de colillas las que se tiran diariamente aunadas a millones de pañales y así de cada tipo de desperdicios que irresponsablemente tiramos. Por tanto no nos quejemos si cada temporada de lluvias se repite la misma historia de ver llorar a miles de familias, desesperadas por haber perdido sus bienes.

Pensar que una colilla de cigarro no afectara en nada