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RRSS, posicionamiento en buscadores y SEO como parte del marketing necesario
En plena era digital, y aunque parezca mentira, todavía hay empresas que consideran que no hace falta invertir en un plan de social media.
Peor aún: muchas marcas y microempresas creen que basta con abrirse unos perfiles en redes sociales y esperar resultados inmediatos.
Algunos directivos, sobre todo aquellos que no están demasiado familiarizados con el universo de las redes sociales ni con internet en general, creen que el social media es una especie de ingrediente secreto para generar ingresos milagrosos. Pero no. A la hora de crear un perfil en las redes sociales, sean cuales sean, es muy importante tener en cuenta lo siguiente: no es un medio para vender, sino para generar conversación.
Dicho de otro modo, la labor de un community manager jamás consistirá en promocionar de manera directa y descarada un producto o un servicio, sino que situará al individuo, al usuario, en el centro de la estrategia. Hablará con él y, sobre todo, lo escuchará. De ese modo, y si la estrategia es la adecuada, con toda probabilidad se crearán nuevas oportunidades de negocio y muchos más usuarios pasarán por el embudo de la conversión, pasando de ser clientes potenciales a clientes fidelizados. No obstante, siempre de manera indirecta.
Ocurre lo mismo con prácticamente todas las estrategias de marketing digital, especialmente con el posicionamiento SEO. Posicionar de manera orgánica una web no genera resultados directos, pero tampoco basta para culminar los indirectos.
El SEO ha de apoyarse en una estrategia de contenidos decente, entendiendo por decente contenidos que resulten atractivos, legibles, didácticos y, en definitiva, útiles de una u otra forma para los usuarios que los encuentren, puesto que los encontrarán siempre como resultado de una búsqueda relacionada en Google.
Hacer marketing en internet, por lo tanto, significa crear un plan detallado y específico, definir unos objetivos medibles, y, sobre todo, tener mucha paciencia. Los beneficios llegarán, pero a medio o largo plazo.
Y, por supuesto, llegarán porque habremos tratado a nuestros clientes potenciales como ellos querían ser tratados: dándoles importancia, legitimando sus quejas, satisfaciendo sus necesidades y resolviendo sus dudas. Así, se quedarán contentos.