El entrenador del Arsenal, Arsène Wenger, fue suspendido cuatro partidos este viernes por la Federación Inglesa de fútbol (FA) por su "comportamiento inapropiado" con el cuarto árbitro del partido del domingo ante el Burnley (2-1) en la Premier League.

Según la FA, el técnico francés aceptó formalmente las acusaciones de la FA, que le reprochaba haber "usado un lenguaje violento y/o insultante contra el cuarto árbitro" y haber "iniciado un contacto físico" con él.

Wenger también fue castigado con una multa de 25.000 libras (29.000 euros). Su suspensión empieza el sábado, en la cuarta ronda de la Copa de Inglaterra, ante el Southampton.

Wenger (67 años) fue expulsado del banquillo por el árbitro del partido, Jon Moss, después de haberse enfadado por un penal concedido al Burnley en el descuento. El entrenador intentó luego seguir los últimos minutos del partido en el túnel del Emirates Stadium y las imágenes de televisión le mostraron empujando a Anthony Taylor, el cuarto árbitro, cuando éste le pidió que abandonara el lugar.

El entrenador alsaciano, que entrena al Arsenal desde 1996, pidió disculpas por su comportamiento.

"Lo lamento. Debería haberme callado, irme y haber vuelto a casa. Pido perdón", declaró después de la victoria de su equipo.